En lo alto de la fría serranía,
Acampando se encontraba el regimiento,
Y una moza que valiente lo seguía,
Locamente enamorada de un sargento.
Popular entre la tropa era Adelita,
La mujer que el sargento adoraba,
Porque a más de ser valiente era bonita,
Y hasta el mismo coronel la respetaba.
Y se oía que decía
aquel que tanto la quería:
Y si Adelita quisiera ser mi novia,
Y si Adelita fuera mi mujer,
Le compraría un vestido de seda,
Para llevarla a bailar al cuartel.
"Y si Adelita se fuera con otro,
La seguiría por tierra y por mar;
Si por mar en un buque de guerra,
Si por tierra en un tren militar."
Una noche en que la escolta regresaba
Conduciendo entre sus filas al sargento,
Por la voz de una mujer que sollozaba,
La plegaria se escucho en el campamento.
Al oirla, el sargento, temeroso
De perder para siempre a su adorada,
Ocultando su emoción bajo el embozo,
A su amada le cantó de esta manera.
Y se oía que decía
aquel que tanto la quería:
"Y si Adelita se fuera con otro,
La seguiría por tierra y por mar;
Si por mar en un buque de guerra,
Si por tierra en un tren militar."
Y después que terminó la cruel batalla,
Y la tropa regresó a su campamento,
Por las bajas que causara la metralla
Muy diezmado regresaba el regimiento.
Recordando aquel sargento sus quereres,
Los soldados que volvían de la guerra
Ofreciéndoles su amor a las mujeres
Entonaban este himno de la guerra:
Y se oía que decía
aquel que tanto la quería:
Y si acaso yo muero en campaña,
Y mi cadáver lo van a sepultar,
Adelita, por Dios te lo ruego,
Que con tus ojos me vayas a llorar.
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